El término Reactor Biológico de Membrana (MBR) hace referencia a la combinación de un proceso de fangos activos y de separación mediante membranas. Las recientes innovaciones técnicas y las reducciones significativas de costes está conduciendo a un aumento en la aplicación de la tecnología MBR al tratamiento de aguas residuales, tanto municipales como industriales. Intrínsecamente a la mejora del proceso, el uso de las bombas lobulares de rotores engomados Boyser aporta unas grandes prestaciones tanto a nivel de mantenimiento como de funcionalidad.
Las bombas lobulares, con gran poder de succión, aspiran el agua a depurar para que atraviese las membranas. Esta agua llamada permeato contiene una cantidad importante de sólidos y bacterias que quedaran alojados en los filtros una vez que toda esta mezcla los atraviese. Consiguiéndose así depurar el agua.
Periódicamente es necesario limpiar los filtros a contracorriente, habitualmente con agua filtrada, y es por ello que se requiere de una bomba capaz de girar en ambos sentidos. Obviamente, la bomba lobular de rotores engomados Boyser lo hace sin ninguna dificultad.
Normalmente los rangos de caudal pueden variar notablemente según el proceso de filtrado o retrolavado, siendo de gran ayuda el uso de un convertidor externo para regular dicho caudal.
Los costes de mantenimiento son ostensiblemente bajos dado el poco desgaste que sufren los componentes de la bomba lobular Boyser, tales como los lóbulos que han sido diseñados para conseguir el máximo rendimiento y durabilidad del mercado. La facilidad para realizar el cambio de los mismos, ofrece un mantenimiento rápido y sencillo y la posibilidad de ahorrar dinero minimizando los tiempos de parada.
